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Hace varios meses que venimos viendo en los medios de comunicación que hay licitaciones en los distintos gobiernos, que quedan desiertas porque no se presenta nadie.
Hubo casos resonantes como el de la reparación de la fachada de la Municipalidad de Bahía, el skatepark nuevo que querían hacer en Vieytes y Buenos Aires.
Pero, con este contexto inflacionario, lo que proponés hoy obviamente para cuando lo hacés tiene un valor mucho más alto. Es un problema.
Pero no es una novedad que haya inflación en Argentina, ¿o sí?
De nuevo caemos en que falta planificación o al menos falta prever situaciones de este tipo. Porque ojo: algunos las prevén y cobran mucho más caro al Estado que a clientes privados.
Pero eso lo terminan haciendo también en épocas no inflacionarias. El aprovechamiento del Estado por parte de muchos privados que venden productos o servicios es patético.
Tampoco existen controles serios y meticulosos sobre las compras y las licitaciones públicas. Las compras en la Municipalidad funcionan más o menos así: en una oficina necesitan comprar algo, por ejemplo computadoras.
- Entonces, un empleado administrativo, o empleada, hace una solicitud a su superior diciéndole que necesita una compu nueva y su superior autoriza la compra.
- En ese momento se comunican con algún proveedor que ya venda computadoras y tecnología a la Municipalidad y que ya esté anotado en los registros. Este proveedor le manda un presupuesto formal con una descripción de la compu y el costo de la misma.
- Con ese presupuesto se hace un llamado a comprar computadoras. Puede ser una compra directa si el monto es bajo. Si el monto es un poco más alto, se hace un concurso de precios, en este caso tenés que pedir al menos 3 presupuestos a varios proveedores y comprás el más barato.
- O sino se llama a licitación, que puede ser pública o privada. Todo depende de los montos, hay límites y cuanto más sube vas cambiando la metodología.
- Cuando elegiste el proveedor al que le vas a comprar, hacés una Orden de Compra que dice que vas a comprar determinada computadora, a determinado proveedor, a un precio equis.
- En el Departamento de Compras del Municipio, y las áreas de Tesorería y Economía avanzan en aprobar la compra hasta que en un momento, después de varias semanas o a veces meses, le avisan al proveedor que traiga la compu. Y un largo tiempo después le hacen la transferencia y le pagan la compu que compró la Muni.
En todo ese proceso, que es largo y tedioso, pasan papeles y expedientes por varias oficinas y por varias manos. Y le ponen muchos sellos y notas explicativas, etcétera. Ahí los controles son bastante laxos.
Por ejemplo: ¿por qué se le pide la mayoría de las veces el presupuesto base a los mismos proveedores? Eso es algo que debería controlarse para ver si no hay algún arreglo con algún proveedor.
Cómo y quién controla a quién le pediste, ni si realmente es un precio de referencia y de mercado. ¿Es probable que la mayoría de las veces nadie se fije eso? Es probable, sí.
Podría darse también que el proveedor que te envió el precio de referencia le ponga un 20% más que el precio de mercado, entonces la Muni le estaría avisando al resto de los proveedores que la compu vale 150, cuando en realidad valdría 100.
En ese caso los proveedores que se presentan no pueden cotizar por encima de 150, pero cotizan cerca del número más alto, 145 por ejemplo. Pero el que presentó el presupuesto de referencia podría pasar un valor de 101 y así ganar la licitación sabiendo que el valor de referencia estaba inflado.
¿Está prohibido que el que presentó el presupuesto de referencia pueda presentarse a comprar? No. Entonces se presenta y gana. ¿Quién controla que eso no suceda?
En el Departamento de Compras no hay muchos controles cruzados. Y de hecho no hay casi nadie que controle lo que se hace en Compras, está sólo el Tribunal de Cuentas de la provincia de Buenos Aires, pero que no tiene capacidad de controlar todo y pide algunos expedientes cada tanto y revisa al azar a ver cómo hacen las cosas.
Pero es al azar… ¿el 1% de las compras quizás sean controladas? Puede ser, pero el resto quedan un poco más libradas a la buena voluntad de todos los que participan.
No existe un control externo a la secretaría de Economía. No existe una dependencia que controle y meta lupas de transparencia. No existe ningún organismo de control.
Ahí tiene la política algo para hacer: proponer y generar un espacio que tenga poder para controlar las compras del Municipio, el Hospital, el Siempre y las Sapems ambiental y de transporte. ¿Te imaginás?
Bueno, las licitaciones son más complejas. Principalmente las de obras públicas porque llevan expedientes que a veces son 10 tomos de papeles con planos y presupuestos y costos. Todo muy complejo.
Pero es más o menos lo mismo: alguien hace el estudio de costo de la obra que se quiere hacer. Y ese alguien lo hace supuestamente a partir de valores de mercado.
Aunque en momentos inflacionarios como el actual, sería central que existieran mecanismos capaces de actualizar los valores de manera más permanente y simple. Sino sucede que una obra que sacaste a licitación en enero, cuando se empieza a ejecutar 6 meses después, vale un 50% menos.
Con esas diferencias de costos y valores, hay muchos empresarios que prefieren no presentarse a las licitaciones. Pero a la vez existen herramientas como la “re determinación de precios”, por la cual estás autorizado a actualizar los montos de las obras públicas., siempre y cuando lleves al día toda la obra.
No es algo simple todo lo que está sucediendo, pero alguien podría estar pensando en cómo estipular nuevas formas de actualización presupuestaria, quizás atado al índice de inflación, u otras maneras.
Pero no. Llaman a licitación, nadie se presenta y se cae. Se llama de nuevo, no se presenta nadie, y no se hace. Y así se echan las culpas unos a otros. Que es culpa de la inflación, que es culpa de los empresarios inescrupulosos, que es culpa de Macri, o de Cristina o de las cuevas que venden dólares.
Y mientras tanto las obras no se hacen…
Pero vamos a los datos… Veamos las licitaciones que quedaron desiertas en la Muni de Bahía: solo este año, 2023, en los primeros 4 meses, la Municipalidad de Bahía Blanca declaró desiertas al menos 19 licitaciones.
Una corresponde a un llamado de la secretaría de Gestión Urbana que la habría declarado desierta adrede. Fue la tercera etapa de la puesta en valor del Parque Independencia. Sugirieron tramitar la obra en un nuevo expediente, por lo que no se presentó nadie y se declaró desierta.
Las restantes 18 son de la secretaría de Infraestructura… En febrero hubo un reencarpetado de la rotonda Nicolás Levalle y Diagonal Moore que quedó desierta. Eran $ 9.240.200. Ahí se llamó a una segunda licitación.
Ese mismo mes también se vino a abajo una licitación para proveer de gas natural a Altos de Miramar. La obra volvió a quedar desierta en abril y se pasó a “otro expediente”. Muchas vueltas, mientras tanto hay gente en Miramar que sigue con garrafas y sin instalación de gas, con todo lo que eso significa.
También en febrero se cayó una licitación privada para mejorar el edificio del departamento de Salud Animal. Y se hizo un segundo llamado por $ 4.838.404. que también se declaró desierta la segunda y llamaron a la tercera… ¡por el mismo monto!
Mismo mes, mismo problema: se declaró desierta y se llamó por segunda vez a licitación privada para remodelar las oficinas de Acción Social por $ 5.847.505. En abril volvió a quedar desierta y se dejó sin efecto.
En marzo se dio una de las que se publicaron en los medios: la puesta en valor de la fachada del Palacio Municipal. Se declaró desierta, se dejó sin efecto y la mandaron a tramitar por otro expediente que… poco más de un mes después volvió a quedar desierta… y ahí desistieron de llamar por tercera vez.
En la primera licitación de la fachada por ejemplo eran 74 millones. Ya en la segunda 95 con tope de 142 millones. Pero listo. Ahí quedó.
Luego vino una extensión de red de desagües cloacales para Patagonia Norte. Se declaró desierta y se llamó por segunda vez con un presupuesto de $ 46.405.135.
Ya en abril se declaró desierta una licitación para adecuar las instalaciones de gas en varias escuelas y jardines de infantes. En esta se hizo un segundo llamado de licitación y la obra alcanzará los $ 5.951.381 si se llega a concretar, claro…
Luego desierto y segundo llamado para una extensión de cloacas en el barrio Los Horneros. La obra tiene un presupuesto de $ 45.758.266.
El 13 de abril quedó desierta y se dejó sin efecto la puesta en valor del edificio de Sarmiento 12. Hay que tener en cuenta que no es un edificio que sea patrimonio municipal. Pero si no lo mejora el Municipio no lo va a hacer nadie. Todo retoque que se hizo desde que está ahí lo hizo la Comuna.
También se dejó sin efecto tras un llamado de licitación algunas tareas que iban a hacer en el Polideportivo Norte, aunque aclaran que se hará por un nuevo expediente.
Lo mismo con la construcción de un skatepark y playón deportivo en Vieytes y Buenos Aires, que no se presentó nadie y tramitó por otro expediente. Finalmente recibió una oferta y debe aprobarlo en Concejo para que se concrete: serán 90 millones y los trabajos durarán 6 meses.
También se dejó sin efecto tras el fracaso de una licitación privada la remodelación del jardín municipal Rayito de Sol. Unas semanas después se volvió a llamar a licitación por el jardín y nuevamente se declaró desierta. Y ahora habrían llamado otra vez. El monto es de $ 6.563.884
La última licitación que se declaró desierta y se pidió que se vuelva a llamar fue una obra de mejoramiento de 4 plazas de la Delegación Norte que se hizo con presupuesto participativo. El municipio piensa invertir $ 27.902.163 en el barrio Paihuen.
- En años anteriores las licitaciones desiertas nunca fueron tantas.
- Por ejemplo: entre enero y abril del año pasado, 2022, hubo 8 licitaciones desiertas.
- En 2021 ninguna.
- En 2020 solo una.
- En 2019 hubo 6.
- En 2018 y en 2017 una sola cada año.
- Y en 2016 hubo 3 desiertas.
Obviamente analizamos las de Bahía que por suerte están publicadas. Aunque seguramente no todas, porque a algunos les gusta no publicar todo, pero hay bastante. En cambio, las licitaciones del gobierno de la provincia no aparecen, no están transparentadas. Provincia es un poco un agujero negro en muchos sentidos. Y en el de transparencia están en el podio de no encontrar nada de nada.