Hola muchachos, estuve en Bahía pero no les avisé, como el prófugo que vuelve al pago para saludar pero trata de pasar desapercibido. O al que enganchan cuando va a votar, aunque esa para mí no aplica más porque ya cambié el domicilio. Fue una decisión difícil, trascedente en la vida de todo bahiense que vive en otra ciudad.
Pero cuando el padrón te marca que votás en Comuna 1 ya podés considerar que cruzaste la frontera. Un poco bahiense, otro poco porteño. Y eso creo que me da vía libre para mirar algunas cositas que para ustedes pasan desapercibidas.
Les debo un texto desde el 15 de junio y no exagero si digo que pienso en eso casi todos los días. Bah, al principio sí pensaba casi todos los días pero ahora ya no tanto, como que te vas acostumbrando.
Pero estuve en Bahía, les dije, y volví a pensar en el tema.
Para empezar, no sé si se dieron cuenta pero Oscar Liberman, el candidato de Milei, se parece mucho a Martín Sabbatella. Sobre todo en el cartel que está en el local de la calle Alsina. Vayan a verlo. No tanto en la imagen que está arriba pero sí en la de abajo. Inesperado. Qué batacazo este muchacho, ¿no?
Debo admitir que está muy linda Alsina, estuve estacionado ahí un rato, creo que de manera irregular.
Puse balizas y esperé un rato largo, mientras mi hermana hacía un trámite. Me llamó mucho la atención la cantidad de gente que entra a la librería Henry un sábado a la tarde. Entran y salen. Entra y salen. ¿Hay guita en Bahía? Parece que sí. Se siguen comprando y vendiendo libros. Regalando libros, eso me gusta pensar. Entró Mario Ortiz también, un prócer total, pero pasó desapercibido.
Creo que esto pasa muchas veces: un grosso total al cual te vas acostumbrando. Cuando viene un extranjero, en este caso yo, se sorprende.
Otro ejemplo: los grisines de Maestro Panadero… Ustedes no tienen ni idea lo ricos que son, ya se acostumbraron.
O la cartelería en el centro: ¿Cómo puede ser que permitan esos carteles publicitarios por sobre la vereda? Un espanto total. Yo votaría al que publicara una ordenanza con la prohibición. La gestión necesaria.
¿Cómo vi la ciudad? Siempre que agarro la ruta 51 tengo la misma imagen. Las bolsas de residuos atrapadas en los alambrados. Es una imagen horrible. Pero también vi la YPF enorme que abrieron por ahí y me dio esperanzas. También que hay muchos edificios nuevos sobre Alem, Sarmiento, Barrio Universitario, yo sé que eso trae problemas pero también diría que es bueno. Fui al parque de Mayo a almorzar y los locales nuevos están muy lindos.
Ah, de paso, estuve sondeando entre mis conocidos si habían escuchado sobre la investigación de los afiches. Muy poco muchachos, y me apena, porque la sociedad reclama un tipo de periodismo que después no consume. No tengo la respuesta de por qué sucede esto. Somos más de las preguntas. Pero hay que seguir, hay que insistir. Es la única manera. Y no crean que acá no pasa. Digo acá porque ya estoy de nuevo en la Comuna 1, meta darle a las teclas.
Me quedan buenas sensaciones del viaje, y por eso me puse a escribir.
No sé si saldé la deuda. Me pueden seguir cobrando la demora. No puedo prometerles nada. Pero fue un placer.
